Por Lucrecia Monge
Aylén Orellana, estudiante de Administración en la Facultad de Ciencias Económicas, es la presidenta de la Federación Universitaria de Córdoba (FUC), que es el mayor cargo de representación gremial estudiantil nucleando 15 centros de estudiantes, bajo la militancia de la agrupación Franja Morada.
– ¿Qué opinas de la universidad pública?
– Creo que la Universidad pública está abocada al pueblo, si la Universidad no está abocada del pueblo, entonces no tiene sentido que sea pública. Creo que las universidades nacionales deben responder a las necesidades de sus contextos y los lugares donde operan y, en cambio, las universidades privadas tienen otros fines más lucrativos o de mercado.
La Universidad tiene incidencia en los lugares en donde se establecen o en donde operan. Un ejemplo de esto, dado en una reunión con los gremios y el decano de Ciencias Exactas, es que los estudiantes de esta facultad estaban trabajando en la potabilización del agua del Dique San Roque; o como estudiantes de Ciencias de la salud participaron en voluntariados en los testeos de COVID; o como en el programa “Universidades Populares”, de la secretaria de Extensión, se buscan brindar diferentes cursos o herramientas educativas a los municipios del interior de la ciudad de Córdoba; o el programa la paz que un poco de apoyo escolar, en donde estudiantes de la de la Universidad van a dar apoyo escolar a diferentes barrios de la ciudad
Me parece importante poder valorizar la Universidad de ese lado, qué es lo que le aporta a la sociedad desde la expansión universitaria hasta la investigación. Por eso creo que es importante realmente invertir en ciencia y en educación, porque es desde la Universidad que nacen ese tipo de soluciones más científicas, más pragmáticas. De alguna forma ayudan al desarrollo socio productivo, tecnológico e innovador de la sociedad y que es lo que hoy la Argentina necesita para salir de esto.
– ¿Cómo está compuesto el presupuesto? ¿Cuál entidad es la más afectada?
– El presupuesto es para todo, pero se les hace foco a las partes de investigación, extensión, enseñanza que comprende a toda la parte educativa, y por otro lado inclusión. Estos cuatro ejes son los prioritarios para el funcionamiento de la universidad.
El más golpeo me parece que, más que todo, es la parte de enseñanza, pero por una cuestión de que los salarios de los docentes están precarizados y que han tenido una pérdida de entre el 40 y 50% del poder adquisitivo. Creo que la parte de enseñanza es por ahí lo más golpeada en ese sentido; no de los esfuerzos que está haciendo la Universidad, pero sí de parte del Gobierno nacional, al no abrir las paritarias, al no centrarse a negociar, al no incluir en los diferentes actores involucrados como en los gremios docentes y no docentes, al no incluirlos en las discusiones y la participación de poder decidir su propio sueldo y condiciones laborales
– ¿Crees que este recorte sea solo una cuestión de inflación?
– No creo que sea una cuestión de inflación, creo que se muestra mucho en los discursos que tiene el presidente, principalmente en Twitter, ya que por un lado va a la educación pública o la educación por parte del estado como una forma de adoctrinamiento. Por otro lado, ha trasladado un discurso en contra de lo público, de lo público como malo, como ineficiente y además se le agrega esto de la ineficiencia del gasto, en cuestiones que para este gobierno le pueden parecer innecesarias.
Creo que esta tan desesperado por bajar la inflación que no se da cuenta de estas herramientas que son necesarias para el progreso de la sociedad argentina, entonces es muy complejo buscar una salida. Además de que su propuesta de campaña y todo en todo lo que se basa fue esto de bajar la inflación. Entonces sí, creo que va por un lado el proyecto de bajar la inflación y por otro lado, este odio hacia lo público, como, por ejemplo, él ha dicho en otros momentos que no va a seguir con la obra pública porque es un espacio o un nicho para la corrupción.
– ¿Qué medidas de ahorro se toman?
– La universidad busca hacer un ahorro en materia de energía eléctrica a través de una campaña de ahorro energético para poder cubrir gastos en las diferentes unidades académicas
En materia de seguridad también, no disminuyendo la seguridad, pero sí haciéndola más eficiente tratando de reducir algunos costos que por ahí no la hacen tan eficiente. Por otro lado, muchas de las Obras Públicas que tiene hoy la Universidad se han frenado para destinar estos fondos a otros espacios que creemos que hoy son de vital importancia y que son los que se trasladan al resto de la sociedad, como la investigación y como la extensión, y las demás unidades académicas y todo lo que implica inclusión estudiantil, como lo son las becas y el comedor.
– En la Universidad de Buenos Aires se especula que no podrán llegar a mitad de año, ¿Cómo se encuentra la situación de cursada acá en Córdoba?
– Actualmente, el Gobierno nacional ha hecho diferentes propuestas en donde se ha aumentado el presupuesto establecido principio de año, que era un presupuesto reconducido, el cual era el mismo presupuesto del año anterior, es decir, que no contemplaba la inflación. Por eso, tras varios reclamos, se ha aumentado un 70% ese presupuesto, lo que sigue siendo ineficiente ya que no cubre la inflación acumulada ni contempla los salarios docentes.
El estudiante universitario se encuentra en una situación de preocupación porque hay muchos discursos en donde se habla de un cierre de las universidades, en donde los profesores también están trasladando este discurso de los estudiantes.
En el caso de la Universidad Nacional de Córdoba, esta tiene garantizada la cursada por este año ya que ha hecho esfuerzos, en materia de energía eléctrica, de seguridad, de obra pública para poder garantizar las actividades de extensión, la actividad de enseñanza en las facultades de investigación y también de inclusión, como por ejemplo las políticas de becas o de comedor universitario,
Es algo que estamos trasladando a los estudiantes para darles un poco más de seguridad en cuanto al contexto, pero no quita que la situación de las universidades nacionales sea crítica porque no todas las universidades tienen la posibilidad de generar estos.
También es una cuestión de salario docente. El docente actualmente está muy precarizado, se ha aumentado un 8%, si no me equivoco en marzo y ahora otro en abril. Pero lo cierto es que no termina de cubrir la inflación y la pérdida del poder adquisitivo del salario docente. Entonces eso también es una complicación, entendiendo que poner en valor la lucha docente, poner en valor su trabajo, también poner en valor la educación pública.
– ¿Qué expectativas tiene para el año que viene?
– Esperamos terminar el año, sin embargo, no sabemos qué va a pasar el año que viene, entendiendo que el Gobierno Nacional no tiene como una prioridad estratégica en la agenda política, la educación pública, laica, gratuita y de calidad. Por eso, aunque hoy podemos decir que la Universidad Nacional de Córdoba termina específicamente el año, no sabemos qué sucederá en los próximos años.
– ¿Qué rol toma la FUC en esta movida?
– Tratamos de nuclear los reclamos e inquietudes de estudiantiles mediante diferentes explicaciones sobre qué pasa a nivel universitario. A su vez estamos coordinando las diferentes fuerzas estudiantiles para que puedan participar en la marcha y en diferentes espacios, que hacen en la lucha colectiva en cuanto a educación pública.
– ¿Qué nivel de participación tiene en el presupuesto a nivel estudiantil?
– Como estudiantes, a nivel nacional, está la Federación Universitaria Argentina que, si bien se le puede ser convocada, no tiene incidencia en la toma de decisiones. En la Universidad Nacional de Córdoba, tenemos espacios de discusión en el Consejo Superior, en donde actualmente contamos con 10 representantes estudiantiles, y donde sí se pueden tomar estas decisiones, como, por ejemplo, como redistribuir el presupuesto que se aprobó, que es el presupuesto aprobado en base a lo que es la nación envío
Sin embargo, no tenemos una incidencia real más allá de los reclamos y las movilizaciones que podemos llegar a hacer a nivel de la universidad, como, por ejemplo, la Federación Universitaria Argentina actualmente es una de las entidades que está convocando a la marcha, tanto en Buenos Aires como a nivel federal
– Según la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), este es el presupuesto más bajo desde 1997 ¿Qué opinas al respecto?
– La educación ha dejado de ser una política estratégica y prioritaria para los gobiernos, o sea, ya no se ve a la educación como una herramienta de movilidad social o de ascendencia social. No se ve la educación como una salida para el desarrollo socio productivo de del país, sino que, a lo largo del tiempo, y también tiene que ver mucho con la crisis económica que estamos atravesando, se ha desvalorizado de alguna forma, entendiendo que esa no todos los sectores sociales pueden acceder a la educación, antes se decía que los que quería n venir a las universidades eran los hijos de obreros, había muchas familias que contaban con el primer universitario de la familia. Y era una herramienta realmente preponderante y hoy en día, como decía, debido a la crisis cultural, social, política, económico que existe en la Argentina es más difícil verla de esa forma.